Sí amas el arte entonces sabes lo poderoso que puede ser, ya sea a través del acto creativo o mediante la enriquecedora experiencia de ser espectador. Con la misión de asistir a los indigentes desde 1983, Heartside Ministries combina el poder del arte para asistir a personas indigentes brindándoles un
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espacio para la creación del arte. Los beneficios que surgen de esta organización sin fines de lucro son muchos. Para los artistas, el proceso creativo ofrece una gama extensa de beneficios mentales, físicos y emocionales. Según la persona, el arte permite la auto-exploración, el desarrollo de destrezas sociales, y la posibilidad de establecer nuevas relaciones interpersonales.
Ese es el caso de Denis Burkett, quien vivía en la calle y admite haber tomado decisiones lamentables. “No me iba muy bien” dice “siempre me estaba metiendo en problemas. Siempre terminaba mal o lamentaba mi proceder.” Hace unos años Denis se incorporó a Heartside Ministries—“Heartside Ministries brinda a personas indigentes la oportunidad de transformar sus vidas por medio del arte. Me ayudaron también a surtir mis recetas médicas y a completar los formularios para adquirir una vivienda de asistencia pública” (conocida en inglés como Section 8).
Desde 1999, la coordinadora del proyecto, Sara Scott, ha trabajado con personas como Denis Burkett, que están al borde del abismo. Cada semana ella enseña a más o menos una docena de participantes que están interesados en clases de pintura y otras manualidades. Ella es una terapeuta del arte encargada de solucionar problemas complejos mediante actos creativos.
Pese a los resultados favorables y anecdóticos, programas de arte-terapia para los indigentes son pocos y distantes el uno del otro.
“Cuesta dinero, y es trabajo arduo,” comenta Scott. Pero a medida que programas como el de Heartside Ministeries demuestre, resultados como el simple hecho de brindar oportunidades creativas, no importa que tan pequeñas sean, se puede lograr marcar la diferencia para la gente viviendo al margen de la sociedad.
“Como personas indigentes, es necesario permanecer con una actitud positiva, y mantener las posibilidades abiertas”. Dijo Burkett, “esa es la única manera en que vas a lograr que vengan. Y generalmente hablando no van a estar dispuestas a hacerlo. La gente no va a gravitar a esta respuesta.
“Y esto como ser humano te valida